Iba yo por el bosque caminando hacia la casa de mi abuelita cuando una voz masculina, me preguntó:
- ¿Dónde vas, Caperucita?
- Pues creía que a casa de mi abuelita pero me tengo que haber equivocado de camino porque casi estoy llegando y no me ha salido el lobo.
- ¡El lobo soy yo!
- ¡Pero si no tienes pelo!
- ¡Mira que eres antigua, niña!
Justo cuando se me partió una uña de porcelana arañándole su depilado torso, vi caer de su bolsillo una tarjeta: “Clínica de Estética Láser”. No me dolió desaparecer de un solo bocado porque el asombro me había anestesiado.
domingo, 29 de julio de 2007
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32 comentarios:
Peroperopero ¿a donde vamos a llegar?...juassssssssss.
Que bien me ha sentado leerte, hoy.
Un abrazo
Qué cosas...
Lo próximo será que hagas un vídeo como el de la niña contando tu peculiar cuento para acabar diciendo con esa cara de niñita que no ha roto un plato en su vida: "¿verdad que lo conté bien?" ;)
Un beso.
jajajajaja que bueno!!!
Gracias por tú comentario, creo que la vida, como todo, depende de como la mires
Un beso
No me extraña nada! ahora ellos casi que presumen más que nosotras...
Me encantó como siempre! =D
Un beso!
La gracia de un blog es que uno se arma el propio cuanto y hasta modofica el original a gusto del consumidor.
saludos
Me siento Caperucita... Basta ya de lobos!!! Me ha encantado esta versión del cuento.
Besitos
Jajaja... lobos metrosexuales!!!
Como ha cambiado el chiste en estos años que corren hasta los lobos se depilan las pelotas, jajaja
Que bueno!
Si caperucita se dejó comer de un bocado es porque quedó más que anestesiada, extasiada!!
Jeje, muy bueno!
Un beso
jajajjaj...
que ideas me asombras con la seleccion de las historias tambien habrian quedado estatica con ese lobo preocupado de su apariencia.
Un abrazo.
¿Y ellos porque se hacen la estetica? No recuerdan un refrán que dice el hombre como el oso...
¿Ya no eran bastante presumidos y egocentricos siendo feos? ¿que nos esepra ahora?
:D
Con lo lindos que están peluditos tipo osito, qué manía con despellejarse...
jaja, me ha gustado mucho tu versión del cuento, hoy en día los lobos se parecen cada vez más a la propia caperucita.
Claro nena, ya no son tiempos para ir por ahí con tremendos pelazos, hasta los lobos feroces han caído en manos del culto al cuerpo y la fiebre por la imagen...
Muy bueno...
BSS
que bacano, pasando por aqui aconocer
jaja... y si siguen cambiando al final será Caperucita quien se coma al lobo. Bien depiladito, eso sí. Tiempo al tiempo. :P
¡Un beso!
que bueno
seguro que a caperucita no le importó ser comida
besos
lágrimas de mar
jajjajaja, increible. Bien seguro que si el cuento se escribiera ahora sería tal y como lo cuentas!!!
Besotes
Estos metrosexuales acaban estropeando todos los cuentos.
Vaya, así que un lobo metrosexual, donde iremos a parar.
Besos
Veo que he plagiado el comentario del Cabezota, eso me pasa por comentar primero y leer después.
Mil perdones.
Yo sabía que el cuento había cambiado, pero ¿tanto, tanto? ¡no! ¡Qué dolor! Pobrecito lobo, lo que le ha tenido que doler...
jeje,a bueno,q arte tienes,seguro q eres publicista
¡Vaya! ¡Un lobo metrosexual! jajajaja...
Por Dios, qué moderno me resulta el lobo feroz depilado... metrosexual, pero moderno igualmente. No te espantes, mujer, hay cosas y pelos peores.
Jjajajajaja como cambia el cuento, ays!
Lo que faltaba, la metrosexualidad ha llegado a mis recuerdos de infancia por tu culpa!!! jajajaja... Creo que no soportaría tener yo más pelos ni que un lobo ni que un chico. Un hombre es un hombre! Y tienen pelos! ¿Dónde se ha visto....? ;))
Muchos besitos,
Lena.
Ni te lo imaginas...
Los tiempos cambian, al igual que las personas.
Besos !
si es que la estética se abre paso en todos los campos, ya hasta en los cuentos infantiles de toda la vida....jajajaj, habrá que ver a ese lobo, to metrosexual...ummm jajaja
por cierto, gracias por pasarte por mi blog ;)
dile a caperucita que se opere la vista!!!
asi reconocera al lobo a distancia.
chauuuuuuuu
Los lobos ya no son lo que eran..
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